Regulación emocional: teniendo en cuenta las dificultades

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foto de perfil de leticia aguilar iborra, psicologa en marbella
Leticia Aguilar

Psicóloga general sanitaria con consulta propia en Marbella y online. Especialista en terapias contextuales

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La regulación emocional puede verse afectada por diversos factores. Comprender las dificultades inherentes es el primer paso hacia una salud psicológica que nos permita dar pasos hacia una vida digna de ser vivida.

Desde el mal humor, a la hipersensibilidad emocional, son varios factores los que dificultan la estabilidad emocional. Por no mencionar el contexto: somos humanos, y nos van pasando cosas a lo largo de la vida que hace que nos desregulemos emocionalmente cuando las habilidades con las que contamos son limitadas para las circunstancias que vivimos.

Mal humor y su impacto en la regulación emocional

El mal humor puede convertirse en un obstáculo significativo para la regulación emocional. Las emociones se aman a sí mismas, y como buen político que aspira a la alcaldía o a la presidencia, estas aspiran a convertirse en estados de ánimo.

Estar desconectados/as de las sensaciones que nos genera la emoción puede desencadenar respuestas emocionales intensas y complicar la gestión emocional cotidiana.

Factores biológicos y su influencia en la regulación emocional

Uno de los factores importantes dentro de las hipótesis que estudian la desregulación emocional son los factores biológicos. Desde la terapia dialéctico – conductual (DBT) conforma uno de los elementos del modelo transaccional que explica el trastorno límite de personalidad.

Ser más sensible a las emociones no es nada malo. Tiene sus pros como por ejemplo una mayor capacidad empática; y contras como la dificultad en el manejo de emociones e impulsos.

El entorno refuerza la escalada emocional

El entorno juega un papel clave en la forma en que expresamos y regulamos nuestras emociones. Así, el entorno que refuerza de manera intermitente la escalada emocional será más difícil para la persona regular sus propias emociones.

Ni la persona que sufre desregulación, ni el entorno, saben a veces cómo funciona esto y los efectos que transfieren ambas partes. Por ello, es importante analizar y explorar de donde viene la persona y qué está ocurriendo en su vida diaria para que una de las partes tome conciencia y pueda tomar otro rumbo de comportamiento.

Sobrecarga emocional y sus consecuencias en la regulación

Me refiero a sobrecarga emocional cuando la persona ha pasado por varias experiencias que han dificultado poner habilidades que le permitan su regulación emocional. Estas experiencias pueden ser diversas y cada uno/a será más sensible a unas circunstancias u otras, dependiendo de su historia vital: conversaciones incómodas, pérdidas, sentirse rechazado/a, juzgado, tener dificultades en conseguir algo, exponernos o asumir algún riesgo, etc.

Si estas experiencias se acumulan, no habiendo conseguido una regulación emocional óptima, o bien se extienden en el tiempo, se sufre sobrecarga emocional, a veces denominada punto de quiebre. En esta, la persona encuentra serias dificultades para regularse emocionalmente ya que las habilidades no alcanzan a la intensidad emocional sufrida. Es donde se pasa a estrategias de tolerancia al malestar.

Mitos sobre las emociones

Los mitos sobre las emociones pueden generar expectativas poco realistas. Además, es el caldo de cultivo para mensajes invalidantes por parte del entorno.

Asimismo, los mitos interfieren con la capacidad de la persona de contactar con emociones que puedan ser desagradables y, a la vez, necesarias para contactar con el mundo de fuera. Aquí se permite el espacio para observarse y ver qué hacen las emociones por nosotros/as.

Falta de habilidades de comunicación interpersonal y su relación con la regulación emocional

Las habilidades de comunicación interpersonal son fundamentales para la regulación emocional. La falta de habilidades, por tanto, puede interferir con sentir emociones dentro de una estabilidad debido a la ausencia de comunicación de necesidades y deseos.

En esto último puede suceder todo lo contrario y es, que si comunicamos, ¿Cómo lo hacemos? ¿Qué efecto tiene en los demás? A veces confundimos comunicar lo que queremos con volverse agresivo/a. Por ello, no hay trabajo en regulación emocional que no involucre el trabajo en eficacia interpersonal.

Abordando las dificultades en regulación emocional

Para un trabajo en regulación emocional puede precisarse ayuda psicológica. Los procesos de terapia van enfocados en gestionar emocionalmente las cosas que nos pasan para vivir una vida lo más plena posible, favoreciendo la autoobservación y el conocimiento de uno/a mismo/a en presencia de emociones intensas.

Si quieres mi ayuda, puedes encontrarme presencial en Marbella o bien a través de terapia online. Estaré encantada de que cuentes conmigo y poder ayudarte.

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